A lo largo de nuestra vida, en varias ocasiones nos hemos visto en la situación de “encontrar trabajo”. El sistema de vida –posición, economía, relaciones, obligaciones, sueldo, objetivos…– que conocemos hasta el momento se acaba así que es necesario plantearse nuevos horizontes. Ésta de encontrar trabajo, es una situación vital que requiere que pongamos mucho de nuestra parte.
Durante ese, a veces convulso, periodo son importantes muchos factores al mismo tiempo: tener una buena preparación, estar atento a las ofertas, aprender a desenvolverte bien en las relaciones, tener éxito en las entrevistas… Por otro lado, supongo que también tienes muy clara la importancia de la búsqueda activa para encontrar trabajo, es decir, la importancia de tu propio compromiso con el cambio así que, enfocaré en el presente artículo me enfocaré en otros aspectos que también son importantes pero que muchas veces, estamos tan agobiados que simplemente “se nos pasan”. Me refiero a los aspectos energéticos vinculados con esta búsqueda.
Sentimiento de impotencia
Es de todos sabido que, muchas personas cuando llevan mucho tiempo sin encontrar trabajo sufren trastornos como el insomnio y/o la depresión. Hace tiempo que buscan y no encuentran así que, en algunos casos terminan por rendirse. Son las personas que se han quedado atrapadas por el sentimiento de impotencia que acaba derivando en miedo e inseguridad. Y cuando esta situación de impotencia se mantiene en el tiempo acaba generando un bloqueo energético específico (Bloqueo de Impotencia) que físicamente afecta la zona de los riñones. Recordemos que los riñones son los responsables de fabricar la energía vital y ésta es la responsable directa de nuestra capacidad para hacer (fuerza, valentía, ilusión, pasión).
Cuando la persona tiene un bloqueo de impotencia, al no disponer de energía orientada al movimiento en el mundo (al hacer) su vibración energética es baja así que, le cuesta mucho mostrarse hacia fuera, superar con éxito una entrevista, etc., o bien sólo se topa con trabajos mal remunerados, muy por debajo de su cualificación. Lo que todavía aumenta más su sensación de impotencia, lo que hace aumentar el bloqueo, lo que hace que disponga de menos energía todavía, y vuelta a empezar. Es una situación que se retroalimenta. En cambio, cuando la persona dispone de suficiente energía para hacer, entonces su vibración energética es alta, se desenvuelve bien “en el mundo” así que el entrevistador captará perfectamente que el candidato es apasionado, responsable y valiente.
Es importante que tengamos en cuenta que estamos planteando esta cuestión desde el punto de vista energético, así que esta vibración alta o baja, no simplemente afecta a nuestro entorno directo sino que se extiende a kilómetros y kilómetros por el Principio de Sincronización (o Ley de Atracción) y llega a polarizar (determinar) la respuesta del mundo hacia nosotros en infinidad de ámbitos. De hecho, cuando sabemos mantener una alta vibración –como esta se extiende más allá de nosotros– es muy habitual que a nuestro alrededor se den lo que parecen casualidades… Y recibes una llamada de un ex compañero de estudios para hablarte de un nuevo tema (porque justo hoy ha pensado en ti), o encuentras una pista interesante (porque precisamente hoy te has fijado en un cartel que ya llevaba semanas ahí, esperándote), etc.
En resumen, mantener una buena vibración es algo que nosotros podemos procurar y que, efectivamente, tendrá gran influencia durante este proceso.
La relación con tu padre
En lo tocante la facilidad o dificultad que tenemos a la hora de encontrar un nuevo trabajo, un factor también a tener en cuenta es cómo se desarrolló la relación con el padre. No necesariamente tenías porque tener una mala relación, podía tratarse simplemente de tu sentimiento de tener un padre ausente, o bien sufriste mucho debido a su enfermedad o, claro está, cuando murió. O incluso, simplemente, puede ser que te preocupase mucho (y esto no lo compartiste con nadie) al verlo tanto tiempo sin encontrar trabajo o en medio de serios problemas económicos.
Cuando cualesquiera de las anteriores situaciones (o similares en relación con el padre) se hayan dado en tu vida de manera sostenida en el tiempo, seguramente tengas un bloqueo paterno, que también influye directamente con nuestra capacidad de acción en la vida. Un Bloqueo Paterno tiene siempre consecuencias en lo tocante a la dificultad de materializar proyectos (un nuevo trabajo, en el fondo, es un nuevo proyecto), todo va a costarte mucho sin embargo cuando logras desbloquear el aspecto Paterno eres capaz de conectar con tu poder de realización y talento natural (aquello que has venido a hacer en esta vida) con lo que todo empieza a ser maravillosamente sencillo.
El poder de nuestra mente
Por otro lado, además de los bloqueos hasta ahora mencionados, Lo que también es importante para encontrar trabajo es el estado y “contenido” de nuestra mente. Tu mente es tremendamente poderosa así que, en función de cual sea el tono de tu pensamiento, llegará a ser incluso destructiva. Cuando piensa en tono negativo (“no encontraré trabajo”) todo se nos volverá en contra, en cambio, si somos capaces de sostener (y creer en) pensamientos positivos (“encuentro trabajo”) entonces el poder de nuestra mente jugará a nuestro favor. Vayamos paso a paso.
Generar pensamientos creativo-positivos
En primer lugar, debes tener muy claro que para cambiar tu realidad y encontrar trabajo tienes que pensar en presente y construir un sustrato de pensamiento basado en afirmaciones en positivo (encuentro, obtengo, hago, funciona, soy…). Cualquier otra modalidad de pensamiento no te ayudará lo más mínimo.
Además de procurar el mantener dentro de ti este sustrato de pensamiento en positivo, debes implicar en el proceso a los cinco sentidos para dar solidez y soporte a este pensamiento. De este modo piensas, visualizas y sientes a la vez y en una única dirección. Sería algo más o menos así.
Te relajas, te imaginas a mi mismo lo mejor que puedas y luego empiezas a construir estos pensamientos en presente y positivo, a los que irás añadiendo dados sensibles (de los sentidos). Piensa
Estoy sentado en la mesa de mi oficina acabando el trabajo de hoy. Estoy satisfecho de cómo he resuelto todas las tareas. Todavía entra la luz del sol por la ventana.
Me siento orgulloso de mi rapidez y efectividad. Desde el sillón, reflexiono sobre lo contento que estoy con mis compañeros. Hacen ruido con los zapatos al pasar cerca de mi mesa.
Hago planes de lo que haré a final de mes con los incentivos que voy a cobrar. Siento el tacto del dinero en la mano.
Me regalo un pequeño viaje, ya que mi sueldo me lo permite. Oigo la música de fondo, una música que siempre me relaja.
También percibo el aroma agradable de este perfume especial que me gusta ponerme cuando voy a la oficina. Miro por la ventana. Veo ahora el atardecer, con unos colores espléndidos. Siento cómo los rayos del sol acarician mi cara en este atardecer. Como cada tarde, saboreo una de las infusiones con las que me obsequian mis compañeros.
Visualiza que, al salir del trabajo, llamas a tu mejor amigo y le cuentas lo contento que estás con tu nuevo empleo; que hay un buen ambiente, que tienes un buen sueldo, que es ideal para ti porque puedes aplicar todos tus conocimientos. Cuéntale los pequeños detalles, procura que esa conversación con tu amigo/a sea lo más real posible.
Con este ejercicio de pensamiento presente y positivo, visualización y anclaje lo que estás haciendo es crear algo que todavía no ha ocurrido. Lo has hecho en presente de indicativo y con frases afirmativas. El poder de esta transformación se ve aumentado cuando aplicas los cinco sentidos. Así, la mente va cambiando su formato.
De hecho, con un poco de práctica, llegaremos a engañar a la mente e impregnándonos de esta vivencia positiva, la mente acabará por desterrar al pensamiento negativo. Por otro lado, con esta nueva dinámica de pensamiento, estaremos utilizando el Principio de Atracción que empezará a moverse para buscar todo aquello que has emitido mentalmente, creando múltiples casualidades que, en el fondo, serán sincronicidades.
Recuerda, si tu mente trabaja en negativo atraerá lo negativo, en cambio cuando piensa en positivo atraerá situaciones positivas así que, no te pongas límites.
Encontrar trabajo algunas veces no es una tarea sencilla, quizás puede llevarte algún tiempo así pues, te recomiendo que además de darle forma a tu Gran Visualización de Trabajo, paralelamente empieces también con visualizaciones mucho más sencillas y que compruebes como uno a uno sí empiezan a funcionarte esos aspectos simples de tu vida, Luego sigue con visualizaciones paulatinamente más complejas, y vuelve a comprobar, etc. Gana confianza y acabarás visualizando perfectamente y con muchísima fuerza tu nuevo y fantástico trabajo, ese que tu deseas y va ha hacerte feliz. Ayúdate, aportándote durante este trayecto, a veces largo, constantes testimonios de éxito en otros aspectos de tu vida.
Ve poco a poco, gana en confianza y deja que el principio de atracción haga el resto.
